domingo, 18 de diciembre de 2016

Recompensas

El día 11 de diciembre salimos Sergio Redondo, Juan Fco. Santos y yo desde el Bar el Sitio de Miajadas, alrededor de las 9 de la mañana, en dirección a Navalmoral de la Mata; junto con las hermanas Parra, Maricruz y Belén.












Allí nos encontraríamos con algún tomate más: Lorena Díez, Adolfo Santos y Alfonso González.



A las 11, en una mañana marcada por una intensa niebla que provocó un sustancial descenso del mercurio, se daba la salida con casi 400 corredores dispuestos a darlo todo en busca de la satisfacción de cruzar la línea de meta.


Tenía decidido hacer esta Media Maratón al lado de Action Juan y, si fuera posible, ayudarle a mejorar su marca personal en esta distancia.

El trazado de este año me pareció que tenía un perfil bastante más sencillo que el tradicional, aunque en algunos momentos resultaba un tanto monótono el volver a pasar por las naves industriales de la localidad.

De cualquier modo, las sensaciones fueron muy buenas durante el primer tercio de carrera, añadiéndosenos algún otro corredor que también pretendía acabar en la horquilla de 1:55 - 1:58.

Tras los primeros kilómetros por asfalto, nos adentrábamos en un largo camino de tierra en el que nos cruzamos con varios de nuestros compañeros a los que saludar.

Fue quizás éste el tramo que, en general, más dificultoso resultó. Juan se ha estado manteniendo toda la carrera en muy buenos ritmos, bajando de 5:30 min./km., pero a partir del 14 o 15 comienza a aflojar levemente. De cualquier modo, seguimos con opciones de alcanzar el objetivo.

Una vez hemos retornado al asfalto cerca del polígono "Campo Arañuelo", lo rodeamos y volvemos hacia el casco urbano. Afrontamos en el kilómetro 18 una subida medianamente dura, en la que Juan da ya síntomas de que la fatiga va haciendo mella en él, pero que le sobra coraje.

Bajamos y volvemos a subir para ya mantenernos en un perfil sin grandes desniveles y sentir ese plus de energía que los ánimos de los vecinos moralos nos iban a regalar en esta última parte del recorrido.

Cada kilómetro se hace más duro que el anterior cuando vas al límite y veo por su cara que ya no tiene ganas de reírse. Trato de que alargue la zancada, pero no le es posible, así que me conformo con que mantenga el ritmo para lograr cruzar la línea de meta.

Sí,  Juan lo había logrado. Su tesón se vio recompensado al reducir su MMP en varios segundos. ¡Grande!

Estos fueron los tiempos:

- Sergio. 1:20:12. Aunque últimamente no luzca el rojo, el expreso de Escurial sigue siendo el más rápido de entre los tomates.





- Adolfo. 1:27:10. Pese a que había pasado unos días complicados y arrastraba molestias, la bala botonera volvió a demostrar el grandísimo nivel que tiene.











- Alfonso. 1:45:20. Que el panan es todo un ejemplo a imitar por su perseverancia era algo por todos sabidos, y esta vez también obtuvo recompensa: Mejor Marca Personal en Media Maratón para el niño de los panes.














- Juan y yo. 1:57:00. Acompañando a este sufridor, que dio otra zancada más hacia Sevilla.



- Lorena. 2:12:22. Con unos escoltas de lujo (Alberto Masa incluido) y casi sin pensarlo, logró acabar su primera Media Maratón... la primera de las muchas que vendrán, ¡enhorabuena Lore!





Mención especial merecen nuestras compañeras de viaje: Belén, que sigue con su mejora de tiempos, acabando esta media en un envidiable crono, 1:52:00 nada menos, y Maricruz que con su 1:30:15 volvió a subir al podio, como tercera en esta ocasión.






Ganadores absolutos de la prueba fueron Jesús Antonio Nuñez, entre los chicos, y Raquel Gómez, en categoría femenina.







Después, en el pabellón Antonio Jara, pudimos recoger un enorme avituallamiento fin de carrera que complementaba una de las mejores bolsas del corredor del circuito extremeño. Asimismo, hubo sorteo de regalos y cantina, lo que nos permitió compartir un rato con otro de los nuestros (aunque últimamente corre poco), el serón Sebastián Quintana. 

En definitiva, por mucho que cambie su recorrido, Nalvalmoral siempre será una de las grandes.

Y ahora se avecinan tiempos de combinar carreras y risas, las san silvestres están aquí.









jueves, 1 de diciembre de 2016

¡Diga 33!




Otra cita ineludible para quien suscribe estas líneas: la Media Maratón Condado de Medellín, que celebró su octava edición el día 27 de noviembre. Trigésimo tercera ocasión en que me iba a enfrentar con esta distancia.




Nos reuníamos para salir a eso de las 9 en el Bar-Restaurante El Sitio de Miajadas un pequeño grupo de tomates conformado por Adolfo Santos, Lorena Díez, Andi Hamedani, Juan Fco. Santos, José Luis Martín y yo.

El día estaba fresco, pero la lluvia parecía haberse retirado tras un par de días de continuos chubascos.





















Mientras los más pequeños corren (algunos de los niños del C.A. Miajadas, con el acompañamiento del entrenador-juez Sergio Redondo, incluidos) nosotros vamos calentando. Se nos une en estos momentos otro tomate más, Alfonso González.




Vengo a esta carrera, como casi todos los años, a disfrutarla sin preocuparme del crono. Así que desde el inicio voy a unirme a la aventura de Action Juan y de nuestro honorable presidente.



Los primeros 7 kilómetros son bastante llanos lo que nos va a permitir rodar entre 5:30 y 5:45 mientras abandonamos el pueblo y recorremos caminos de tierra encharcados, flanqueados por recolectores de aceituna.


Al rodear la charca me sorprende la ausencia de pescadores en lugar habitualmente tan concurrido. Parece ser que han aparecido numerosos peces muertos recientemente lo que ha obligado a prohibir que se pesque temporalmente. ¡Una lástima!


Y aun más triste si cabe, la terrible invasión de camalote que sufre el Guadiana y de la que vamos a poder ser testigos en nuestro primer paso por el puente romano.


Aproximadamente en el kilómetro 8 nos va a tocar la primera de las grandes pruebas de este circuito: subir por primera vez a los aledaños del Restaurante Quinto Cecilio. Enorme desnivel que nos obliga a echarnos a andar hasta coronar la cuesta.

Ya en lo alto, recorremos la urbanización desde la que las vistas del pueblo y de los paisajes naturales de la zona son inmejorables.


Bajada reteniendo un poco, aunque desde luego invita a correr, y una vez en el llano de nuevo atravesaremos por segunda ocasión el puente para comenzar a subir a continuación al monumental castillo condal.

Bastante gente de Miajadas animándonos en este punto, lo que nos obliga a esforzarnos un punto más para llegar a esta segunda cima. Aunque casi peor es la bajada sobre escalones adoquinados, y en algunos tramos algo mojado, que obliga a extremar precauciones.


























Desde allí vamos directos al pase por meta con Bruno Paixao a punto de doblarnos.



Comenzamos la segunda vuelta, que será más corta, al eliminarse la parte de la charca.

Tercera vez que cruzamos el puente para volver a subir al Quinto Cecilio, cruzándonos cada vez con menos gente... y cada vez riéndonos menos... 

Repetida la primera gesta, vamos a acometer la segunda y tras recorrer por última vez el puente volvemos a subir hacia el monumental conjunto histórico donde me permito algún caprichito en forma de acelerón en la subida.

Tras reagruparnos una vez más tras la bajada del castillo, vislumbramos por fin la ansiada línea de meta y con una sonrisa en los labios la atravesamos.





Dado que mi objetivo para esta ocasión era rodar a ritmos cómodos y lo exigente del recorrido contento con las buenísimas sensaciones físicas, una vez más sin el menor atisbo de calambres.







Nuestros resultados fueron los siguientes:

- Lorena. Completó la primera vuelta de unos 12 kms. en torno a 1 hora 12 minutos. Ni las cuestas borraron su sempiterna sonrisa.




- Adolfo. 1:31:57. Esta vez no hubo podio, pero no está nada mal ser 23º de la general en la prueba más dura del circuito extremeño de Grandes Carreras.


- Andi. 1:46:17. Sigue manteniéndose en un grandioso estado de forma.



- Alfonso. 1:56:28. La leyenda del panan sigue creciendo. Te viene de empalme de currar, te corre una media maratón en un tiempazo y le sobra tiempo para hacerte un reportaje fotográfico. 






















- José Luis, Juan y yo. 2:12:04. Cerrando carrera sin más pretensiones en el día de hoy que disfrutar del running.





Vencedores absolutos de la prueba fueron Bruno Paixao, en categoría masculina, con un tiempo de 1:11:42 y Raquel Gómez, entre las féminas, que acabó en 1:32:39.

La carrera estuvo, un año más, fenomenalmente organizada, y por un muy buen precio contamos con cuatro avituallamientos, numerosos voluntarios y control del tráfico y una completísima bolsa del corredor... solo un "pero": deberían administrarse mejor a la hora del reparto de las porciones de pizza, ya que los del vagón de cola ni la catamos.

Próxima parada en esta nueva Road to Barcelona... Navalmoral de la Mata.

martes, 15 de noviembre de 2016

Cuando fuimos los mejores...

El día 13 de noviembre se disputaba una de esas medias maratones que desde que me inicié en el running es fija en mi calendario: la IV Media Maratón "Juan Mateos Broncano" de Trujillo. No en vano he corrido todas sus ediciones.













Un buen número de aficionados a ésto de correr salíamos desde Miajadas a eso de las 9 de la mañana en representación del Tomate Running y del C.A. Miajadas: Santi López, Reme García, Fco. José Pulido, Montse Grande, Juan Fco.Santos, Lorena Díez, Adolfo Santos, Jose Mª Díaz, Sergio Redondo, Alberto Masa, Maricruz Parras, Antonio Javier Cañamero, Juanjo Sánchez, Antonio Ruiz, Belén Parras, José Antonio Morcillo, Fernando Bravo y yo.

Además, ya en Trujillo se nos unirían Alfonso González y Fran Recio para acabar de conformar una selección de corredores populares de primer nivel.


Es siempre esta una carrera con abundante participación y además el tiempo acompañaba, por lo que había un gran ambiente en la Plaza Mayor. 


A las 10:30 se daba la salida para las tres modalidades principales de la carrera: media maratón individual, media maratón por relevos y 10,5 kms que aglutinaban a un total de más de 300 atletas.

Por mi parte, comencé la carrera en ritmos de entre 5:10 y 5:20 durante los primeros kilómetros, declinando la invitación de hacerla junto con los otros inscritos a los 21k, Peseta y Fran. Prefiero seguir a mi ritmo e ir viendo cómo transcurre.

Es una carrera que no destaca especialmente por la belleza de su recorrido y una vez abandonada la zona urbana se empieza a hacer pesada, más por el calor que por la propia dificultad del trazado. 

Sobre el kilómetro 5 paso junto a una de mis compañeras, Reme, a la que tras un amplio periodo de escasa actividad se la nota que está sufriendo un poquito.

Algo más tarde, ya por el 7, mis ritmos van mejorando (4:50 - 5:10 min/km.) y disfruto del intercambio mutuo de ánimos con los compañeros con los que voy cruzándome.

Pasado el kilómetro 9, antes del avituallamiento de la salida de Huertas de Ánimas, temiendo que el desgaste provocado por las altas temperaturas pueda reducir mis posibilidades de completar la carrera decido tomarme un gel.

Finalizada la larga avenida ascendente, justo por detrás de la admirable Belén Parras, llego a la zona de los relevos... aunque a mí me toca continuar otra vuelta más :(

Comienza así una segunda vuelta en la que la sensación de calor disminuye porque comienza a soplar una agradable brisa.

A partir de ahora se tratará de mantener el ritmo e ir viendo si se puede mejorar en los kilómetros finales para un modesto objetivo de en torno a 1:50.

Sin embargo, pasado el 13, diviso en lontananza la roja indumentaria que, por la característica zancada, no puede pertenecer a otro sino a Juan.

Tardaré todavía un poco, más de 1 kilómetro, en darle alcance. A partir de este punto, dado que cuento con buena compañía para charlar y que los ritmos van a ser suaves, la carrera se convierte en un paseo del que disfrutar.

Tras sufrir en el kilómetro 18,  en plena subida, el adelantamiento de Adolfo (la zigzagueante bala botonera), el perfil se mantendrá bastante favorable por las calles de Huertas de Ánimas, hasta llegar de nuevo al tendido ascenso de la Avda. Reina María Cristina que une la pedanía con Trujillo. Zona esta en la que el aroma de los aperitivos de bares y restaurantes reclama ya la atención de nuestros estómagos.

Finalizado este tramo, el gran obstáculo de esta carrera: la gran cuesta de la Avda. de la Coronación donde se forjan las leyendas (o al menos alguna anécdota para echar unas risas).

A un ritmo de poco más de 6 min./km. logramos conquistarla, sorprendiéndome mi acompañante una vez llegados a su cúspide con un "apretón" para entrar en meta en un tiempo muy próximo a lo previsto.

Ahora era el momento de recuperar energías en La Troya mientras corren los más pequeños a la espera del momento de la entrega de trofeos, donde íbamos a teñir de rojo varios podios.



Los tiempos y galardones fueron los siguientes:

10,5 k.

- Kiki y Montse. 0:54:01. Gran carrera la que hizo esta pareja y que sirvió a Montse para ser primera de su categoría. 




- Reme. 1:02:31. Se sobrepuso a las dificultades y completó el recorrido, acabando tercera de la categoría.





Media maratón por relevos masculina.

- Sergio (junto a Juanjo Sánchez). 1:20:05. Para subir a lo más alto del cajón.




- Alfonso (junto a Antonio Ruiz ). 1:42:53. Segundos de la categoría.



- Santi y Juan.1:51:32. Para ellos el bronce.

         



Media maratón por relevos mixta.

- Adolfo y Lorena. 1:46:29. Terceros de la modalidad, sólo por detrás de la pareja del C.A. Miajadas, Maricruz y Alberto, y de la asociación tío-sobrina de José Antonio y Belén.











Media maratón individual.

- Jose Peseta. 1:41:01. Su mayor "trofeo" está al caer.



- Fran. 1:42:42. Uno de los tomates más viajeros, del que cuesta tener noticias y que marca verdaderos tiempazos cada vez que nos obsequia con su presencia.























- Yo. 1:51:32. Carrera sin sufrimiento finalizada en los tiempos previstos.



Campeón absoluto de la prueba reina fue Jorge Campos del C.D. Navalmaratón con un crono de 1:13:20 y el vallisoletano Miguel Ángel Bocos venció en la carrera corta en 0:38:33.



¡Enhorabuena a todos los que lograron trofeo! Aunque el mayor premio son los ratos compartidos con tan buena gente.

Y ahora a por otro pedazo de historia: Metellinum.